Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 5,27-33 – EN aquellos días, los apóstoles fueron conducidos a comparecer ante el Sanedrín y el sumo sacerdote los interrogó, diciendo: «¿No os habíamos ordenado formalmente no enseñar en ese Nombre? En cambio, habéis llenado Jerusalén con vuestra enseñanza y queréis hacernos responsables de la sangre de ese hombre».
Pedro y los apóstoles replicaron: «Hay que obedecer a Dios antes que a los hombres. El Dios de nuestros padres resucitó a Jesús, a quien vosotros matasteis, colgándolo de un madero. Dios lo ha exaltado con su diestra, haciéndolo jefe y salvador, para otorgar a Israel la conversión y el perdón de los pecados.
Testigos de esto somos nosotros y el Espíritu Santo, que Dios da a los que lo obedecen». Ellos, al oír esto, se consumían de rabia y trataban de matarlos.
Contents
¿Donde dice que es mejor obedecer a Dios?
Pasajes adicionales de las Escrituras –
- Abraham 3:25 (vinimos a la tierra para probar que seríamos obedientes).
- 1 Samuel 15:22 (la obediencia es mejor que el sacrificio).
- Eclesiastés 12:13 ; Juan 14:15 ; Romanos 6:16 ; D. y C. 78:7 ; 132:36 ; Deuteronomio 4:1–40 (debemos obedecer a Dios).
- 2 Nefi 31:7 (Jesucristo fue obediente).
- Proverbios 3:1–4 ; 6:20–22 ; 7:1–3 ; Efesios 6:1–3 ; Colosenses 3:20 (los hijos deben obedecer a sus padres).
- D. y C. 21:4–6 (debemos obedecer al profeta).
- Juan 8:29–32 ; Mosíah 2:22, 41 ; D. y C. 82:10 ; 1 Nefi 2:20 (las bendiciones de la obediencia).
- D. y C. 58:21–22 ; 98:4–6 ; 134:5–7 (la obediencia a las leyes del país).
- Isaías 60:12 ; D. y C. 1:14 ; 93:39 ; 132:6, 39 (las consecuencias de la desobediencia).
- 2 Nefi 31:16 ; D. y C. 53:7 ; Mateo 24:13 ; Lucas 9:62 (perseverar hasta el fin).
¿Qué dice en Hechos 5 29?
1 Pero un hombre llamado a Ananías , con Safira, su esposa, b vendió una propiedad 2 y a se quedó con parte del b precio , sabiéndolo también su esposa; y trayendo solo c una parte, la puso a los pies de los apóstoles. 3 Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué ha llenado Satanás tu corazón para que a mintieses al Espíritu Santo y b te quedases con parte del precio de la heredad? 4 Reteniéndola, ¿no te quedaba a ti? Y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué a pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios.
5 Entonces Ananías, al oír estas palabras, cayó y a expiró. Y vino un gran temor sobre todos los que lo oyeron. 6 Y levantándose los jóvenes, lo envolvieron, y sacándolo, lo sepultaron. 7 Y pasado un espacio como de tres horas, sucedió que entró su esposa, sin saber lo que había acontecido.
8 Entonces Pedro le dijo: Dime: ¿vendisteis en tanto la heredad? Y ella dijo: Sí, en tanto. 9 Y Pedro le dijo: ¿Por qué os pusisteis de acuerdo para a tentar al Espíritu del Señor? He aquí a la puerta los pies de los que han sepultado a tu marido, y te sacarán a ti.
10 Y al instante ella cayó a los pies de él y expiró; y cuando entraron los jóvenes, la hallaron muerta; y la sacaron y la sepultaron junto a su marido. 11 Y vino un gran temor sobre toda la iglesia y sobre todos los que oyeron estas cosas.
12 Y por las manos de los apóstoles se hacían muchos a milagros y prodigios entre el pueblo; y estaban todos unánimes en el pórtico de Salomón. 13 Y de los a demás , ninguno se atrevía a juntarse con ellos; no obstante, el pueblo los alababa grandemente.
14 Y los que creían en el Señor a aumentaban más, gran número tanto de hombres como de mujeres, 15 tanto que sacaban a los enfermos a las calles y los ponían en camas y en lechos, para que, al pasar Pedro, a lo menos su a sombra cayese sobre alguno de ellos.
16 Y aun de las ciudades vecinas concurrían multitudes a Jerusalén, trayendo enfermos y atormentados por espíritus inmundos; y todos eran a sanados. 17 Entonces, levantándose el sumo sacerdote y todos los que estaban con él, que era la secta de los a saduceos , se llenaron de b celos ; 18 y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.
- 19 Pero un a ángel del Señor, abriendo de noche las b puertas de la cárcel, y sacándolos, dijo: 20 Id, y estando en el templo, hablad al pueblo todas las a palabras de esta vida;
- 21 Y habiendo oído esto, entraron de mañana en el templo y enseñaban;
Entretanto, vinieron el sumo sacerdote y los que estaban con él, convocaron al concilio y a todos los ancianos de los hijos de Israel, y enviaron a la cárcel para que fuesen traídos. 22 Pero cuando llegaron los oficiales y no los hallaron en la cárcel, volvieron y dieron aviso, 23 diciendo: Por cierto, la cárcel hemos hallado cerrada con toda seguridad y los guardias que estaban delante de las puertas; pero cuando abrimos, a nadie hallamos dentro.
24 Y cuando oyeron estas palabras el sumo sacerdote y el capitán de la guardia del templo y los principales sacerdotes, dudaban en qué vendría a parar aquello. 25 Pero viniendo uno, les dio esta noticia: He aquí, los varones que echasteis en la cárcel están en el templo y enseñan al pueblo.
26 Entonces fue el capitán de la guardia con los oficiales y los trajo sin violencia, porque temían ser apedreados por el pueblo. 27 Y cuando los trajeron, los presentaron ante el concilio; y el sumo sacerdote les preguntó, 28 diciendo: ¿No os a mandamos estrictamente que no enseñaseis en ese nombre? Y he aquí, habéis llenado a Jerusalén de vuestra doctrina y queréis echar sobre nosotros la b sangre de ese hombre.
- 29 Y respondiendo Pedro y los apóstoles, dijeron: Es necesario a obedecer a Dios antes que a los hombres;
- 30 El Dios de nuestros padres levantó a Jesús, a quien vosotros matasteis a colgándole de un madero;
31 A este, Dios ha a exaltado con su diestra como b Príncipe y c Salvador , para dar a Israel arrepentimiento y d remisión de pecados. 32 Y nosotros somos a testigos suyos de estas cosas, y también el b Espíritu Santo , que ha c dado Dios a los que le obedecen.
- 33 Ellos, oyendo esto, a se enfurecieron y consultaban entre sí para matarlos;
- 34 Entonces, levantándose en el concilio un fariseo llamado a Gamaliel , doctor de la ley, venerado por todo el pueblo, mandó que sacasen fuera por un momento a los apóstoles;
35 Y les dijo: Varones israelitas, mirad por vosotros lo que vais a hacer con respecto a estos hombres. 36 Porque antes de estos días se levantó Teudas, diciendo que era alguien; a este se unió un número como de cuatrocientos hombres, pero él fue muerto; y todos los que le creyeron fueron dispersados y reducidos a nada.
37 Después de este, se levantó Judas, el galileo, en los días del censo, y llevó mucho pueblo tras sí. Pereció también él, y todos los que le seguían fueron dispersados. 38 Y ahora os digo: Apartaos de estos hombres y dejadlos, porque si este consejo o esta obra es de los a hombres , se desvanecerá; 39 pero si es de Dios, no la podréis destruir; a no sea que seáis tal vez hallados b luchando contra Dios.
40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les ordenaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los soltaron. 41 Y ellos partieron de delante del concilio, a gozosos de haber sido tenidos por dignos de b padecer c afrenta por causa del d Nombre.
¿Qué dice Galatas 1 10 en la Biblia?
‘Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo’.
¿Qué dice la Biblia sobre obedecer al hombre?
1 Samuel 15:22 – Y Samuel dijo: ¿Se complace el Señor tanto en los holocaustos y víctimas, como en que se obedezca a las palabras de Señor? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar atención que la grosura de los carneros (1 Sa 15:22).
¿Qué es mejor agradar a Dios oa los hombres?
Obedecer a Dios antes que a los hombres | John MacArthur
En Hechos 4:19,20, 5:29 Pedro y Juan dicen: decidan ustedes a quien es permitido obedecer a Dios o ha ustedes. No podemos quedarnos callados sin decir lo que hemos visto y oído. Más pedro con los otros Apóstoles respondieron: Nosotros tenemos que obedecer a Dios antes que a los hombres.
- * Dándonos a entender que sobre todo debemos obedecer a Dios antes que a las autoridades terrenales o religiosas como también a los hombres sin importar si es al: Concilio, Pastor, Líderes, etc;
- Y un ejemplo de esto es la historia de Elías y Eliseo en: 2 de Reyes 2:1, hasta el 16;
Fíjese que aún el profeta Elías no sabia que Dios iba ha darle a Eliseo esa doble porción del Espíritu Santo y por esa razón el mismo Elías que era el líder de Eliseo le sirvió de tropiezo, obstáculo, impedimento, y aún los demás profetas también le dijeron que Dios se iba a llevar a Elías que lo dejara tranquilo, más Eliseo le decía que se callaran y continuaba caminando con Elías porque al parecer el tenía un sentir de parte de Dios para seguir con Elías.
- Hay sentir de parte de Dios, Filipenses 2:13, pero también ay sentir de parte del diablo, Mateo 27: 3,5, Eliseo aún desobedeciendo a Elías recibió como recompensa una doble porción de la unción= Al poder de Dios que tenía Elías a través del Espíritu Santo Eliseo la consiguio en vida y en muerte ósea doble unción, ver 2 de Reyes cáp: 4,5,6:11,12*13:20,21 muchos creen que el tenía el espíritu de Elías pero el espíritu de un hombre no es el que ejerce los milagros sino un espíritu superior al espíritu humano ya sea el Espíritu Santo o un demonio en la persona según: Hechos 3:15,16, ya que la sombra de Pedro no hacía ningún milagro antes de convertirse sino que ahora que tenía un tiempo convertido el Espíritu Santo ministraba a través de el, usando hasta su sombra;
También en Hechos 16:16: Un espíritu en una mujer ministraba adivinación, pero esto no significa que los demonios saben el futuro ya que el único que sabe el futuro es Dios ver: Eclesiastés 3:22, 6:12, Isaías 8:16,21; 44:25,26 Deuteronomio18:21,22, dice: Pero si dijeres en tu corazón como vamos a saber si Jehová habló o no, así dice Jehová, el profeta que dijere que Dios dijo y lo que el dice no se cumple es por que Jehová no ha hablado sino que el profeta habló por si mismo no le temáis.
También en Apocalipsis 19:10, Dice que el testimonio de Jesús ósea su palabra es el espíritu de la profecía. Gálatas 1:10, dice: Porque ¿busco yo ahora el favor de los hombres o el de Dios? ¿O es que intento agradar a los hombres? Si todavía tratara de agradar a los hombres no seria un siervo de Cristo sino un siervo de hombres.
* Dando ha entender que al que debemos que obedecer sobre todo es a Dios para no convertirnos en siervos de hombres, pero si a tu hermano le molesta algo que tu haces o tienes y eso lo hace a el pecar aunque eso que tu usas o tienes no sea pecado lo mejor es que no lo hagas o uses dicha cosa delante de el para ayudar a que tu hermano se salve ya que es débil en la fe.
Según Romanos 14:15 hasta el 23, 1 Corintios 8:13,9:20 hasta el 23. El apóstol pablo conoció la verdad y la verdad lo libertó, abandonando la religiosidad humana que había aprendido de Gamaliel el cual era fariseo de fariseo = a maestro de fariseos, y los fariseos eran maestros de la ley de Moisés, dado el testimonio por el mismo Apóstol Pablo en; Filipenses 3:5 hasta el 11 ¿Está usted dispuesto a hacer lo mismo para agradar a Dios? ¿O prefiere seguir lo que aprendió de los hombres? La decisión es de usted porque ya yo tomé la mía de obedecer a Dios aún tenga que desobedecer a un líder o concilio al que pertenezco, ya que los concilios actuales ósea de este tiempo varían su doctrina a cada rato como si fuera una camisa o un pantalón y con lo cual demuestran que no tienen una seguridad en lo que enseñan.
Además en Dios no hay sombra de variación lea: Malaquias 3:6, Hebreos 13:8*Jesucristo es el mimo ayer, y hoy, y por los siglos. En el libro de Mateo 15: 1 hasta el 14, él mismo Jesús reprendió a los fariseos los cuales eran los maestros de la ley de Moisés por que ellos estaban enseñando doctrinas y tradiciones de hombres y por esa razón cristo lo reprende duramente y así mismo existen en los diferentes concilio de estos tiempos personas que están enseñando doctrina de hombres y tradiciones humanas las cuales no son del agrado de Dios.
- Cuando Cristo le dice que bien profetizó de ellos el profeta Isaías diciendo: Este pueblo de labios me honra pero su corazón está lejos de mí el culto que me rinden consiste en normas humanas repetidas de memorias;
Fue profetizado en Isaías 29:13, Partes: 1 , 2 , 3 , 4.
¿Qué dice en Romanos 12 2?
2 Y no os adaptéis a este a mundo, sino transformaos por medio de la b renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál es la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
¿Qué dice en Romanos 13 1?
Romanos 13. Pablo aconseja: Someteos a los siervos de Dios; guardad los mandamientos; amaos unos a otros; la rectitud conduce a la salvación. 1 a Sométase toda alma a las autoridades superiores, porque no hay b autoridad c sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios son ordenadas.
¿Qué dice Colosenses 3 22?
22 a Esclavos, obedeced en todo a vuestros amos terrenales, no sirviendo al ojo, como los que agradan a los hombres, sino con sencillez de corazón, b temiendo a Dios.
¿Qué dice Marcos 10 27?
1 Y partiendo de allí, fue a la región de Judea y al otro lado del Jordán; y volvió el pueblo a reunirse con él, y de nuevo les enseñaba como solía. 2 Y acercándose los fariseos, le preguntaron, para tentarle, si era lícito al marido repudiar a su esposa.
3 Pero él, respondiendo, les dijo: ¿Qué os mandó Moisés? 4 Y ellos dijeron: Moisés permitió escribir carta de divorcio y repudiar la. 5 Y respondiendo Jesús, les dijo: Por la dureza de vuestro corazón, os escribió este mandamiento; 6 pero al principio de la creación, varón y mujer los hizo Dios.
7 Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y a se unirá a su esposa. 8 Y los dos serán una sola carne; así que no son ya más dos, sino una sola carne. 9 Por tanto, lo que Dios a ha unido, no lo b separe el hombre. 10 Y en casa volvieron los discípulos a preguntarle sobre lo mismo.
11 Y les dijo: Cualquiera que repudia a su mujer y se casa con otra comete adulterio contra ella; 12 y si la mujer repudia a su marido y se casa con otro, comete adulterio. 13 Y le presentaban niños para que los tocase, pero los discípulos reprendían a los que los presentaban.
14 Y viéndolo Jesús, se indignó y les dijo: Dejad a los a niños venir a mí y no se lo impidáis, porque de los tales es el reino de Dios. 15 De cierto os digo que el que no reciba el reino de Dios como un a niño no entrará en él. 16 Y tomándolos en los brazos, poniendo las manos sobre ellos, los a bendecía.
17 Y cuando salía él para seguir su camino, vino uno corriendo, e hincando la rodilla delante de él, le preguntó: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? 18 Y Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay a bueno , sino solo uno, Dios.
19 Los mandamientos sabes: No a cometas adulterio. No b mates. No c hurtes. No digas falso testimonio. No d defraudes. e Honra a tu padre y a tu madre. 20 Él entonces, respondiendo, le dijo: Maestro, todo esto lo he guardado desde mi juventud. 21 Entonces Jesús, mirándole, le amó y le dijo: Una cosa te falta: ve, vende todo lo que tienes y a da a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, b sígueme , tomando tu cruz.
- 22 Pero él, entristecido por esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones;
- 23 Entonces Jesús, mirando alrededor, dijo a sus discípulos: ¡Cuán difícilmente entrarán en el reino de Dios los que tienen riquezas! 24 Y los discípulos se asombraron de sus palabras; pero Jesús, respondiendo, volvió a decirles: ¡Hijos, cuán difícil les es entrar en el reino de Dios a los que a confían en las b riquezas ! 25 Más fácil es pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios;
26 Y ellos se asombraban aún más, diciendo entre sí: ¿Y quién podrá salvarse? 27 Entonces Jesús, mirándolos, dijo: a Para los hombres es imposible, pero no para Dios, porque todas las cosas son b posibles para Dios. 28 Entonces Pedro comenzó a decirle: He aquí, nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido.
- 29 Y respondiendo Jesús, dijo: De cierto os digo que no hay ninguno que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o esposa, o hijos o tierras, por causa de mí y del evangelio, 30 que no reciba a cien veces más ahora en este tiempo, casas, y hermanos, y hermanas, y madres, e hijos y heredades, en medio de persecuciones; y en el mundo venidero, la b vida eterna;
31 a Pero muchos primeros serán postreros, y los postreros, primeros. 32 Y estaban en el camino subiendo a Jerusalén; y Jesús iba delante de ellos, y se asombraban y le seguían con miedo; entonces, volviendo a tomar a los doce aparte, les comenzó a decir las cosas que le habían de acontecer: 33 He aquí subimos a Jerusalén, y el a Hijo del Hombre será entregado a los principales sacerdotes y a los b escribas , y le condenarán a muerte y le entregarán a los gentiles.
34 Y le a escarnecerán , y le b azotarán , y le escupirán y le matarán; pero al tercer día c resucitará. 35 Entonces Jacobo y Juan, hijos de Zebedeo, se acercaron a él, diciendo: Maestro, queremos que nos concedas lo que vamos a pedirte.
36 Y él les dijo: ¿Qué queréis que os conceda? 37 Y ellos le dijeron: Concédenos que en tu gloria nos sentemos el uno a tu derecha y el otro a tu izquierda. 38 Entonces Jesús les dijo: No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber del vaso que yo bebo, o ser bautizados con el bautismo con que yo soy bautizado? 39 Y ellos le dijeron: Podemos.
Y Jesús les dijo: A la verdad, del vaso que yo bebo, beberéis; y con el bautismo con que yo soy bautizado, seréis bautizados. 40 Pero que os sentéis a mi derecha y a mi izquierda, no es mío darlo, sino a aquellos para quienes está preparado.
41 Y cuando lo oyeron los diez, comenzaron a enojarse con Jacobo y con Juan. 42 Pero Jesús, llamándolos, les dijo: Sabéis que los que son reconocidos como gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que en ellas son grandes tienen sobre ellas potestad.
43 Pero no será así entre vosotros, sino que el que quiera hacerse a grande entre vosotros será vuestro b servidor ; 44 y cualquiera de entre vosotros que quiera ser el a primero será b siervo de todos.
45 Porque el Hijo del Hombre tampoco vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida a en rescate por muchos. 46 Entonces llegaron a Jericó; y al salir él de Jericó, y sus discípulos y una gran multitud, a Bartimeo , el ciego, hijo de Timeo, estaba sentado junto al camino, mendigando.
- 47 Y al oír que era Jesús, el de Nazaret, comenzó a dar voces y a decir: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí! 48 Y muchos le reprendían para que callase, pero él daba mayores voces: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí! 49 Entonces Jesús, deteniéndose, mandó llamarle; y llamaron al ciego, diciéndole: Ten confianza; levántate, te llama;
50 Él entonces, arrojando su capa, se levantó y fue a Jesús. 51 Y respondiendo Jesús, le dijo: ¿Qué quieres que haga por ti? Y el ciego le dijo: Maestro, que recobre la vista. 52 Y Jesús le dijo: Ve, tu fe te ha sanado. Y al instante recobró la vista y seguía a Jesús por el camino..
¿Qué dice Efesios 6 6?
La carta a los efesios anima a los esclavos a verse a sí mismos como “siervos de Cristo” que sirven “de buena voluntad” al Señor en vez de a sus amos humanos (Ef 6:6–7). El hecho de que su trabajo sea para Cristo los animará a trabajar duro y bien. Por eso, las palabras de Pablo son un consuelo cuando los amos les ordenan a los esclavos que hagan un buen trabajo.
- En ese caso, Dios recompensará al esclavo (Ef 6:8) incluso si el amo no lo recompensa, como ocurre con los esclavos comúnmente (Lc 17:8);
- Pero, ¿por qué servirle como esclavo a un amo terrenal sería necesariamente hacer “la voluntad de Dios” (Ef 6:6)? Seguramente un amo podría ordenarle a su esclavo que haga un trabajo que esté lejos de la voluntad de Dios, como abusar de otro esclavo, engañar a un cliente o invadir los campos de alguien más;
Pablo clarifica, “Siervos, obedeced a vuestros amos en la tierra, con temor y temblor, con la sinceridad de vuestro corazón, como a Cristo” (Ef 6:5). Los esclavos solo pueden hacer por sus amos lo que se podría hacer para Cristo. Cuando un amo les ordena a sus esclavos que hagan lo malo, las palabras de Pablo se convierten en un gran reto, porque el esclavo tendría que rehusarse a seguir las órdenes de su amo, lo que podría traer consecuencias desagradables, por no decir más.
- Sin embargo, el mandato de Pablo es ineludible;
- “Servid… como al Señor y no a los hombres” (Ef 6:7);
- Los mandatos del Señor están por encima de los mandatos de cualquier amo;
- De hecho, ¿qué más podría significar “con la sinceridad de vuestro corazón”, si no es dejar de lado todas las órdenes que entran en conflicto con el deber que tenemos frente a Cristo? Jesús dice que, “nadie puede servir a dos señores” (Mt 6:24);
El castigo por la desobediencia de un amo terrenal puede ser temible, pero puede que sea necesario sufrir para llegar a trabajar como para el Señor.
¿Qué dice la Biblia en Romanos 8 28?
1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no a andan conforme a la carne, sino conforme al espíritu. 2 Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha a librado de la ley del pecado y de la muerte. 3 Porque lo que era imposible para la a ley , por cuanto era b débil por la carne , c Dios , enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado, y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne, 4 para que la justicia de la ley fuese cumplida en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al espíritu.
5 Porque los que viven conforme a la carne, en las cosas que son de la carne se ocupan; pero los que viven conforme al espíritu, en las cosas del espíritu. 6 Porque el ánimo a carnal es b muerte , pero el ánimo c espiritual es vida y d paz.
7 Por cuanto la inclinación de la carne es enemistad contra Dios, porque no se sujeta a la ley de Dios, ni tampoco puede. 8 Así que, los que viven según la carne no pueden agradar a Dios. 9 Pero vosotros no vivís según la carne, sino según el espíritu, si es que el a Espíritu de Dios mora en vosotros.
Y si alguno no tiene el b Espíritu de Cristo , no es de él. 10 Y si a Cristo está en vosotros, b el cuerpo a la verdad está muerto a causa del pecado, pero el Espíritu es vida a causa de la c justicia. 11 Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó a Cristo Jesús de los muertos a vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros.
12 Así que, hermanos, deudores somos, no a la carne, para que vivamos conforme a la carne, 13 porque si vivís conforme a la carne, a moriréis ; pero si por el espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis. 14 Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, son a hijos de Dios.
15 Porque no habéis recibido el espíritu de a servidumbre para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre! 16 Porque el Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu de que somos a hijos de Dios.
17 Y si hijos, también a herederos ; herederos de Dios, y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados. 18 Porque considero que los a sufrimientos de este tiempo no son dignos de ser comparados con la b gloria venidera que c en nosotros ha de ser manifestada.
- 19 Porque el anhelo profundo de la creación es el esperar la manifestación de los hijos de Dios;
- 20 Porque la creación fue a sujetada a la vanidad, no de buen grado, sino por causa del que la sujetó en esperanza, 21 porque también la creación misma será a librada de la servidumbre de la corrupción a la libertad gloriosa de los hijos de Dios;
22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una sufre dolores de parto hasta ahora. 23 Y no solo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las a primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la b adopción , a saber, la c redención de nuestro cuerpo.
24 Porque en a esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que b se ve, ya no es esperanza, porque lo que se ve, ¿para qué esperarlo? 25 Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo esperamos. 26 Y asimismo, también el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad, porque no sabemos lo que hemos de a pedir como es debido, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.
27 Pero el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque él, conforme a la voluntad de Dios, a intercede por los santos. 28 Y sabemos que para los que aman a Dios, a todas las cosas obrarán juntamente para su bien, para los que conforme a su propósito son llamados.
29 a Porque a los que b antes conoció, también c predestinó para que fuesen hechos d conforme a la e imagen de su Hijo, a fin de que él sea el f primogénito entre muchos hermanos; 30 y a los que predestinó, a estos también llamó; y a los que llamó, a estos también justificó; y a los que justificó, a estos también glorificó.
31 ¿Pues qué diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién a contra nosotros ? 32 a El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que le entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él b todas las cosas? 33 ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica.
34 ¿Quién es el que condenará? a Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, quien además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros. 35 ¿Quién nos apartará del a amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada? 36 Como está escrito: a Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; somos considerados como ovejas de matadero.
37 Antes bien, en todas estas cosas somos más que a vencedores por medio de aquel que nos amó. 38 Por lo cual estoy convencido de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, 39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá apartar del a amor de Dios, que es en Cristo Jesús, Señor nuestro..
¿Qué dice Hechos 13 22?
22 Y después de haber quitado a este, les levantó por rey a a David, de quien dio también testimonio, diciendo: He hallado a David hijo de Isaí, varón conforme a mi b corazón, quien hará todo lo que yo quiero. 23 De la a descendencia de este, Dios, conforme a la b promesa, levantó a Jesús por c Salvador a Israel.
¿Qué dice Romanos 5 19?
1 a Justificados , pues, por la b fe , tenemos c paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo, 2 por medio de quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.
- 3 Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las a tribulaciones , sabiendo que la tribulación produce b paciencia ; 4 y la paciencia, a prueba ; y la prueba, esperanza; 5 y la a esperanza no avergüenza, porque el b amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado;
6 Porque Cristo, cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por los impíos. 7 Difícilmente alguien muere por un justo; con todo, pudiera ser que alguno osara morir por el bueno. 8 Mas Dios demuestra su amor para con nosotros, en que, siendo aún a pecadores , Cristo murió por nosotros.
9 Mucho más ahora, habiendo sido justificados por su a sangre , por medio de él seremos salvos de la ira. 10 Porque si siendo enemigos, fuimos a reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando ya reconciliados, seremos b salvos por su vida.
11 Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en Dios por medio del Señor nuestro Jesucristo, por quien hemos recibido ahora la a reconciliación. 12 Por consiguiente, como el a pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la b muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos c pecaron.
- 13 Porque aun antes de la ley había pecado en el mundo; pero el pecado no se tiene en cuenta cuando no hay a ley;
- 14 No obstante, reinó la muerte desde Adán hasta Moisés, aun en los que no pecaron a la manera de la transgresión de Adán, el cual es a figura del que había de venir;
15 Pero el don no es como la transgresión. Porque si por la transgresión de uno murieron los muchos, más abundó la gracia y el don de Dios para los muchos, por la gracia de un hombre, Jesucristo. 16 Ni tampoco el don es como el pecado de aquel; porque a la verdad el juicio vino por un solo pecado para condenación, mas la gracia vino por muchas transgresiones para justificación.
17 Porque si por la transgresión de uno solo reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por medio de uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la a gracia y del don de la justicia. 18 Así que, como por la transgresión de uno solo vino la condenación a todos los hombres, así también por la justicia de uno solo vino la gracia a todos los hombres para justificación de vida.
19 Porque así como a por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la b obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos. 20 Pero la ley se introdujo para que el pecado abundase; mas cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia, 21 para que así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la a justicia para b vida eterna por medio de Jesucristo, nuestro Señor..
¿Quién fue el hombre más obediente de la Biblia?
(1-1) Introducción – Muchos fueron los reyes que ascendieron al trono de Israel desde la época de Saúl hasta la disolución de los dos reinos, el de Israel y el de Judá. Ninguno de estos reyes alcanzó el poder y prestigio que lograra Salomón. Casi mil años antes de Salomón, se le había prometido a Abraham que su simiente recibiría la tierra de Canaán como herencia, incluyendo el territorio del norte hasta el Eufrates (véase Génesis 12:7; 13:15; 15:18).
Pero esta promesa no se cumplió sino hasta la época de Salomón. Este extendió el dominio de Israel desde el Mar Rojo al sur hasta el Eufrates al norte (véase la sección de Mapas: “El imperio de David y de Salomón”).
La época de oro de Israel se inició bajo el reinado de David y continuó con Salomón. Durante los cuarenta largos años en que Salomón fue rey de Israel, hubo paz y unidad en todo su vasto dominio. Al principio de su reinado, Salomón amaba al Dios de Israel e hizo convenio con El de que sería obediente todo el tiempo que fuera rey de Israel.
A Salomón se le prometió sabiduría, riquezas, honor y larga vida si continuaba en rectitud ante el Señor. Esta promesa se cumplió, ya que durante su vida Salomón llegó a ser conocido por su sabiduría. Grandes personajes de todas las naciones fueron a verlo y a poner a prueba su conocimiento.
También adquirió gran riqueza, y se dIce que en toda la tierra no había ningún rey que pudiera compararse con él. Bajo el mando de Salomón, Israel alcanzó el punto más destacado de su historia como nación: honor, bienes, poder y respeto entre todas las naciones… todo fue suyo por causa del talento administrativo del más grande de sus reyes.
Sin embargo, al final de su reinado, Israel estaba en bancarrota espiritual y temporal. Su prestigio había declinado. El deterioro y las dificultades se manifestaban en todo. Un año después de la muerte de Salomón, el país se dividió en dos reinos, y el curso de la historia de Israel quedó permanentemente alterado.
¿Qué fue lo que llevó a la nación desde tales alturas a profundidades tan trágicas? Encontrará la respuesta en el primer libro de los Reyes. Al leer, trate de identificar los acontecimientos que propiciaron la caída de Israel.
¿Qué dice Proverbios 6 20?
20 Guarda, hijo mío, el mandamiento de tu padre,y no abandones la a enseñanza de tu madre; 21 átalos siempre en tu corazón,enlázalos a tu cuello. 22 Te guiarán cuando camines, cuando duermas te guardarán,y hablarán contigo cuando despiertes.
¿Qué dice Romanos 5 19?
1 a Justificados , pues, por la b fe , tenemos c paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo, 2 por medio de quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.
- 3 Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las a tribulaciones , sabiendo que la tribulación produce b paciencia ; 4 y la paciencia, a prueba ; y la prueba, esperanza; 5 y la a esperanza no avergüenza, porque el b amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado;
6 Porque Cristo, cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por los impíos. 7 Difícilmente alguien muere por un justo; con todo, pudiera ser que alguno osara morir por el bueno. 8 Mas Dios demuestra su amor para con nosotros, en que, siendo aún a pecadores , Cristo murió por nosotros.
9 Mucho más ahora, habiendo sido justificados por su a sangre , por medio de él seremos salvos de la ira. 10 Porque si siendo enemigos, fuimos a reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando ya reconciliados, seremos b salvos por su vida.
11 Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en Dios por medio del Señor nuestro Jesucristo, por quien hemos recibido ahora la a reconciliación. 12 Por consiguiente, como el a pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la b muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos c pecaron.
13 Porque aun antes de la ley había pecado en el mundo; pero el pecado no se tiene en cuenta cuando no hay a ley. 14 No obstante, reinó la muerte desde Adán hasta Moisés, aun en los que no pecaron a la manera de la transgresión de Adán, el cual es a figura del que había de venir.
15 Pero el don no es como la transgresión. Porque si por la transgresión de uno murieron los muchos, más abundó la gracia y el don de Dios para los muchos, por la gracia de un hombre, Jesucristo. 16 Ni tampoco el don es como el pecado de aquel; porque a la verdad el juicio vino por un solo pecado para condenación, mas la gracia vino por muchas transgresiones para justificación.
17 Porque si por la transgresión de uno solo reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por medio de uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la a gracia y del don de la justicia. 18 Así que, como por la transgresión de uno solo vino la condenación a todos los hombres, así también por la justicia de uno solo vino la gracia a todos los hombres para justificación de vida.
19 Porque así como a por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la b obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos. 20 Pero la ley se introdujo para que el pecado abundase; mas cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia, 21 para que así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la a justicia para b vida eterna por medio de Jesucristo, nuestro Señor..
¿Qué dice Juan 15 16?
16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os a elegí a vosotros, y os he b puesto para que vayáis y llevéis c fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi d nombre, él os lo dé.
¿Qué dice en Santiago 1 22?
1 a Santiago , siervo de Dios y del Señor Jesucristo, a las doce tribus que están b esparcidas : Salud. 2 Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en a diversas pruebas, 3 sabiendo que la a prueba de vuestra fe produce b paciencia. 4 Pero tenga la paciencia su obra a perfecta , para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna.
- 5 a Y si alguno de vosotros tiene falta de b sabiduría , c pídala a Dios, quien da a todos abundantemente y sin reproche, y d le será dada;
- 6 Pero pida con a fe , no dudando nada, porque el que duda es semejante a la ola del mar, que es movida por el viento y echada de una parte a otra;
7 No piense, pues, ese hombre que recibirá cosa alguna del Señor. 8 El hombre de a doble ánimo es inconstante en todos sus caminos. 9 El hermano que es de a condición humilde, regocíjese en su exaltada posición; 10 pero el que es rico, en su condición humilde, porque él pasará como la flor de la a hierba.
11 Porque cuando sale el sol con calor abrasador, la hierba se seca, y su flor se cae y perece su hermosa apariencia; así también se marchitará a el rico en todos sus caminos. 12 Bienaventurado el hombre que a soporta la tentación , porque una vez que haya sido b aprobado , recibirá la c corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.
13 Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios, porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie, 14 sino que cada uno es a tentado , cuando de su propia b concupiscencia es atraído y seducido. 15 Y la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el a pecado ; y el pecado, siendo consumado, da a luz la b muerte.
16 Amados hermanos míos, no erréis. 17 Toda a buena dádiva y todo don perfecto viene de lo alto, y b desciende del Padre de las c luces , en quien no hay d cambio ni sombra de variación. 18 Él, de su voluntad, nos hizo nacer por la palabra de verdad, para que fuésemos como las a primicias de sus criaturas.
19 Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para a hablar , b tardo para airarse, 20 porque la ira del hombre no produce la justicia de Dios. 21 Por lo cual, desechando toda a inmundicia y exceso de malicia que tanto abunda, recibid con b mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas.
22 Pero sed a hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos. 23 Porque si alguno es a oidor de la palabra, y no hacedor de ella, este es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural.
24 Porque después de mirarse a sí mismo, se va, y enseguida se olvida de cómo era. 25 Pero el que mira atentamente en la a perfecta ley, la de la libertad, y b persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, este será bienaventurado en lo que hace.
¿Qué dice Proverbios 10 22?
22 La bendición de Jehová es la que enriquece,y no añade tristeza con ella. 23 El hacer maldad es como una diversión para el insensato,pero el hombre entendido tiene sabiduría. 24 Lo que el malvado teme, eso le vendrá,pero a los justos les será concedido lo que desean.