En Qué País Nació Jesús?

En Qué País Nació Jesús
La Iglesia de La Natividad y la ruta de peregrinación en Belén, en Palestina, salieron de la Lista del Patrimonio Mundial en Peligro gracias a los trabajos de restauración realizados en el techo y la fachada de la basílica, informó la UNESCO. También se retiraron de esa lista las Oficinas salitreras de Humberstone y Santa Laura, en Chile.

  1. El sitio Lugar de Nacimiento de Jesús: Iglesia de la Natividad y ruta de peregrinación en Belén, en Palestina, salió de la Lista del Patrimonio Mundial en Peligro, este martes, siete años después de haber ingresado a ella dado el deterioro del inmueble;

El Comité del Patrimonio Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) encargado de vigilar la situación de esos sitios explicó que la decisión se basó en la calidad del trabajo realizado en la Iglesia de la Natividad, al que se refirió con elogios.

La restauración del edificio incluyó el techo, las fachadas exteriores y los mosaicos murales, así como las puertas de la basílica. El Comité de la UNESCO también citó con satisfacción la cancelación de un proyecto de construcción de un túnel en la plaza del Nacimiento y aplaudió la adopción de un plan de gestión para la conservación del sitio.

El Lugar de Nacimiento de Jesús: Iglesia de la Natividad y ruta de peregrinación en Belén está situado a 10 km al sur de Jerusalén, en el lugar en el que los cristianos creen que nació Jesucristo. En el 399 d. se construyó una primera iglesia, que fue sustituida por otra en el siglo VI a raíz de un incendio.

En la iglesia actual se conservan suelos de mosaico muy elaborados procedentes del edificio original. El sitio incluye también conventos e iglesias latinas, griegas, ortodoxas, franciscanas y armenias, así como campanarios, jardines en terraza y una ruta de peregrinación.

El sitio fue inscrito simultáneamente en 2012 en la Lista del Patrimonio Mundial y en la del Patrimonio Mundial en Peligro debido al deterioro que mostraba la Iglesia de la Natividad.

¿Dónde nació Jesús y en qué país?

Herodes, el Mesías y el censo de Quirino – Los relatos de los llamados Evangelios de la Infancia, el de Mateo (capítulos 1 y 2) y el de Lucas (capítulos 1 al 3), nos ofrecen dos anclajes cronológicos: el primero, que aparece en Lucas 1. 5 y en Mateo 2.

1, afirma que Jesús nació en tiempos del rey Herodes el Grande (40-4 a. ), y el segundo, en Lucas 2. 1-2, que coincidió con el censo que, en tiempos de Augusto, Quirino llevó a cabo en la provincia romana de Siria, y del que también tenemos noticias por Flavio Josefo, historiador judío del siglo I d.

que, tanto en sus Antigüedades de los judíos XVII. 355 y XVIII. 26. 102 como en su Guerra Judía VII. 253, menciona este censo y destaca su carácter novedoso y sin precedentes. Ahora bien: se sabe con absoluta certeza que Quirino solo fue gobernador de la provincia de Siria (que en ese momento ya incluía Judea) en el año 6 de nuestra era. En Qué País Nació Jesús La matanza de los inocentes (1611), óleo sobre tabla de Peter Paul Rubens (1577-1640), Art Gallery of Ontario, Canadá. Herodes el Grande es un personaje con muy mala fama en la tradición bíblica –y por supuesto en la tradición cristiana posterior a la vida de Jesús de Nazaret– en especial debido a este particular episodio, si bien sin duda se trata de un relato mítico que no guarda veracidad histórica.

Así pues, las dos noticias, el reinado de Herodes y el censo de Quirino, son incompatibles desde un punto de vista cronológico. No obstante, se puede explicar la mención del censo como un recurso del evangelista Lucas para justificar la presencia de José y María lejos de su lugar de residencia en Galilea y su viaje hasta Belén, todo ello para hacer que se cumplieran las palabras del profeta Miqueas, que aseguraba que el Mesías habría de nacer en la ciudad natal del rey David: «Pero tú, Belén de Efratah, aunque pequeña para figurar en los clanes de Judá, de ti me saldrá quien ha de ser dominador de Israel, cuyo origen viene de antaño, desde los días antiguos».

(Miqueas 5. 1) Más allá de estos versículos, a nadie se le escapaba que Belén había sido la cuna del rey David y que, por lo tanto, resultaría lógico que también naciese en esa ciudad el Mesías, descendiente de aquél y en el que se encarnaba la promesa hecha a este rey por Dios: «Cuando tu vida llegue a su fin y vayas a descansar entre tus antepasados, yo pondré en el trono a uno de tus propios descendientes, y afirmaré su Reino.

Será él quien construya una casa en mi honor, y yo afirmaré su trono real para siempre. Yo seré su padre, y él será mi hijo. Así que, cuando haga lo malo, lo castigaré con varas y azotes, como lo haría un padre.

Sin embargo, no le negaré mi amor, como se lo negué a Saúl, a quien abandoné para abrirte paso. Tu casa y tu Reino durarán para siempre delante de mí; tu trono quedará establecido para siempre». (2 Samuel 7. 12-16) Pero no solo el lugar de nacimiento es fruto de la necesidad de situar a Jesús dentro del esquema del esperado Mesías, sino que hay otros elementos de la historia que cumplen esta misma función.

  • Cuando los magos de Oriente se presentan ante Herodes para preguntarle por el recién nacido, el rey, asustado ante la posibilidad de perder su trono, ordena el asesinato de todos los niños menores de dos años de Belén;

Resulta sorprendente que Flavio Josefo, enemigo acérrimo de Herodes el Grande, no consigne este hecho en sus obras, cuando puso el mayor empeño en citar, uno por uno, todos los crímenes imputables al monarca idumeo. ¿Cómo se explica pasar por alto semejante masacre, la prueba concluyente de la abyección de Herodes? Sencillamente, porque nunca sucedió.

Hay que hacer notar la similitud entre este episodio y otro del Antiguo Testamento, en Éxodo 1, sobre el nacimiento de Moisés, donde el faraón ordena la muerte de todos los niños hebreos de su reino. El propósito de esta narración es doble.

Por una parte, al atribuir el crimen a Herodes, se proporciona un marco histórico adecuado y creíble a la profecía: «Una voz se oyó en Ramá, Un llanto y un gran lamento: Raquel llorando a sus hijos ¡Y no quería consolarse, porque ya no existen!» (Jeremías 31.

15) Este versículo, trasladado al Nuevo Testamento, identifica a Raquel con el pueblo de Belén, donde se encuentra su tumba. Y así, los hijos de Raquel son los niños asesinados en Belén por orden de Herodes.

Por otra parte, se adivina en Mateo una intención de presentar a Jesús como el “nuevo Moisés” , que promulgará (en concreto en el sermón de la montaña) una ley que superará la que este recibió en el Sinaí. De ahí que ambos personajes vivan también situaciones paralelas en sus primeros momentos de vida.

Fuera de estas menciones en los llamados Evangelios de la Infancia de Mateo y Lucas, todos los indicios del resto de textos evangélicos apuntan en otra dirección diferente a Belén: Jesús nació probablemente en Galilea , unos trescientos kilómetros al norte de Jerusalén y de la propia ciudad natal de David.

En numerosas ocasiones recibe el nombre de Iesous ho nazarenos, o bien ho Nazoraios, lo que, para algunos, significa que era natural de Nazaret, en Galilea, que se suele citar como patria de Jesús y su familia (“y llegó a Nazaret, donde se había criado”, Lucas 4.

¿Dónde nació Jesús en la Biblia?

Ante la pregunta: ¿dónde nació Jesús?, la respuesta parece sencilla: en Belén. Lo aprendemos desde niños al celebrar la Navidad y lo cantamos todos los años en los villancicos alrededor del pesebre. Sin embargo, al analizar con detenimiento el Nuevo Testamento descubrimos que no es tan fácil fijar el lugar del nacimiento de Jesús.

Es cierto que dos evangelistas, Mateo y Lucas, afirman expresamente que Jesús nació en Belén. Mateo dice: “Cuando nació Jesús en Belén de Judea, en tiempos del rey Herodes…”. Y Lucas: “Cuando ellos (José y María) estaban allí (en Belén), ella dio a luz a su hijo primogénito”.

Pero los o tros dos evangelistas, Marcos y Juan, presentan a Jesús como si hubiera nacido en Nazaret. En efecto, siempre lo llaman “Jesús de Nazaret”; y sabemos que en la Biblia, cuando después del nombre de una persona se menciona una ciudad, es porque se trata de su lugar de nacimiento.

  • ¿Cuál sería, entonces, la cuna de Jesús: Belén o Nazaret? (Leer también:  Los claroscuros del Papa Francisco ) Marcos;
  • El primer Evangelio que se escribió, el de Marcos, da a entender que Jesús nació en Nazaret;

Ya al principio, cuando relata su bautismo, dice que Jesús “vino de Nazaret de Galilea”. Es decir, no menciona ninguna otra ciudad de origen fuera de esta. Después, cuando Jesús se va a Nazaret, dice que “se fue a su patria”, y patria (en griego: “patris”) significa literalmente “la tierra natal”, “el lugar de nacimiento”.

Esto lo confirma el mismo Jesús cuando, ante el escándalo que producen sus enseñanzas en Nazaret, él exclama: “Un profeta sólo en su patria, entre sus parientes y en su casa, es despreciado”. Además, todo el mundo lo conoce como Jesús de Nazaret: el endemoniado de Cafarnaúm, la criada del Sumo Sacerdote, el ángel del sepulcro y hasta el mismo evangelista Marcos.

Por lo tanto, cuando Marcos escribió su Evangelio, dio a entender a sus lectores que Jesús había nacido en Nazaret. (Leer también:  ¿Palo para Macri?: “El neoliberalismo prefiere una Iglesia cerrada”, dijo un aliado del Papa ) Un pueblo de mala muerte. El cuarto evangelista, San Juan, también afirma que Jesús nació en Nazaret.

Comienza presentándolo como “un profeta de Nazaret” y dice que todos saben que era de Nazaret. Por ejemplo, Natanael, no quiere creer en él porque dice: “¿Acaso de Nazaret puede salir algo bueno?”. En efecto, Nazaret era una ciudad ignota, minúscula y de mala fama.

Tan insignificante, que en el Antiguo Testamento no se la menciona nunca. Incluso cuando el libro de Josué describe la región de Galilea, saltea a Nazaret. Tampoco la nombra Flavio Josefo, el gran historiador judío del siglo I; al describir las guerras judías contra los romanos, menciona 54 ciudades galileas, pero ignora a Nazaret.

  • Y el “Talmud”, una antiquísima colección de escritos judíos, enumera una lista de 63 ciudades galileas entre las que está ausente Nazaret;
  • Debió de haber sido, pues, una pequeña aldea sin ninguna importancia;

Por eso, que alguien tan importante como Jesús hubiera nacido allí, producía escándalo entre la gente. A pesar de eso, el “Evangelio de Juan” en ningún momento aclara que Jesús no era de Nazaret. Al contrario, lo afirma varias veces. Por ejemplo, al contar una discusión entre los judíos sobre el origen de Jesús, dice que algunos lo rechazan como Mesías porque sabían que había nacido en Nazaret y comentaban: “¿Acaso el Mesías va a venir de Galilea? ¿No dice la Escritura que vendrá… de Belén?”.

Y nadie se encarga de explicar que Jesús había nacido en Belén. Más adelante, San Juan afirma que los judíos no querían creer en Jesús porque era de Galilea, y “de Galilea no sale ningún profeta”. En el “Cuarto Evangelio” tampoco se afirma que Jesús haya nacido en Belén.

Al contrario, siempre está presente la idea de que había nacido en Nazaret. (Leer también:  El hermano de Marcos Peña se enojó con la Iglesia por la misa de Moyano ) Sólo para la infancia. Vemos, pues, que las dos únicas veces en todo el Nuevo Testamento que se dice que Jesús nació en Belén son en los relatos de la infancia de Mateo y Lucas.

En ninguna otra parte se menciona ni una sola palabra sobre el origen belenita de Jesús. Ni siquiera San Pablo , que tuvo que discutir acaloradamente varias veces con los lectores de sus cartas para tratar de convencerlos de que Jesús era el Mesías, y a quien le hubiera venido muy bien el argumento de que Jesús había nacido en Belén, parece conocer tal información.

Entonces, ¿son o no históricas las afirmaciones de Mateo y de Lucas sobre el nacimiento de Jesús en Belén? Posiblemente, no. En primer lugar, porque incluso estos dos evangelistas, a pesar de decir que Jesús nació en Belén, cuando lo presentan en su vida adulta cambian su discurso y lo llaman “Jesús de Nazaret”.

En segundo lugar, porque los relatos de Mateo y de Lucas se contradicen. Según San Mateo, Jesús habría nacido en Belén porque sus padres vivían en Belén. En cambio, según Lucas, Jesús habría nacido en Belén porque su familia estaba de paso en dicha ciudad con motivo de un censo.

También se contradicen en cuanto al tiempo que Jesús vivió en Belén. Según Mateo, estuvo allí casi dos años (Mateo 2,16), hasta que su familia huyó a Egipto. En cambio, según Lucas, Jesús se fue a vivir a Nazaret cuando tenía un mes y medio de vida (Lucas 2,39).

Las pruebas evangélicas sobre el nacimiento de Jesús en Belén son más bien débiles. Pero resultan ser abrumadores los datos en contra. Por eso, la mayoría de los biblistas hoy sostiene que la ciudad natal de Jesús no habría sido Belén, sino Nazaret.

Entonces, ¿por qué Mateo y Lucas colocan su nacimiento en Belén? (Leer también:  Escándalo de abusos en Chile: el Papa Francisco hace limpieza ) Cada sucesor, una desilusión. En la actualidad, los estudiosos sostienen que el nacimiento de Jesús en Belén, más que una indicación histórica, resulta una indicación teológica.

  1. Es decir, los evangelistas Mateo y Lucas pretendieron transmitir una idea religiosa —enunciada en forma de relato histórico— con el fin de dejar una enseñanza;
  2. Se trata de una manera de expresarse muy propia de los pueblos semitas;

¿Y cuál es la enseñanza del nacimiento de Jesús en Belén? Quisieron decir que Jesús era el Mesías esperado por el pueblo de Israel. Con objeto de entender esto, tengamos en cuenta que para la mentalidad judía el futuro Mesías debía ser un descendiente de la familia del rey David, porque según una antigua promesa que el profeta Natán había hecho al rey David cuando este vivía, Dios había asegurado que nunca iba a faltar un descendiente suyo en el trono de Jerusalén.

  • Frente a la inseguridad en la que vivían los monarcas antiguos —de la falta de un hijo varón para que les sucediera y de que otra familia reinara en su lugar—, Dios le garantizó a David un descendiente suyo (un mesías, es decir, un ungido) en Jerusalén, y que lo haría con sabiduría y con justicia;
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Pero cada nuevo rey que subía al trono de Jerusalén era una nueva desilusión para la gente, que veía cómo se sucedían gobernantes corruptos y malvados, desentendidos del pueblo y preocupados sólo por sus intereses personales. Por eso, cada vez que moría un rey y subía su hijo, el pueblo se preguntaba si este sería el Mesías que estaban esperando, que traería la prosperidad y la paz al pueblo.

Abandonar el ambiente de la Capital. Hacia el año 500 a. , un profeta anónimo anunció que iba a modificar estas expectativas. Esa profecía hoy se encuentra en el libro de “Miqueas”, y dice así: “Pero tú, Belén de Efratá, aunque eres pequeña entre las aldeas de Judá, de ti saldrá el que ha de dominar Israel… Él gobernará con el poder y la majestad de Yahvé, su Dios”.

El profeta anunciaba que sí iba a llegar el tan ansiado Mesías, pero vendría de Belén, de donde procedía el rey David. El profeta no se refería directamente al nacimiento de Jesús. Los profetas no adivinaban el futuro ni buscaban predecir hechos desvinculados de la realidad en la que vivían.

  • Su misión era anunciar una palabra de Dios que tuviera que ver con el presente de sus oyentes;
  • Lo que el profeta quiso decir era que Dios no miraba con buenos ojos a la corte de Jerusalén;
  • Esta ciudad, en la que se habían prostituido tantos reyes con el lujo y el poder, no resultaba ser el mejor ambiente para que surgiera el Mesías;

David, el rey más grande que tuvo Israel, había nacido en la humilde Belén. Si ahora ellos querían tener al nuevo Mesías, había que volver a preparar el mismo ambiente de Belén. La profecía no pretendía fijar un lugar geográfico para el nacimiento del sucesor del Rey.

Simplemente, proponía a los gobernantes de Jerusalén volver a la humildad y a la sencillez de sus orígenes. Es decir, sugería cortar con el actual modo de hacer política. (Leer también:  La Iglesia llama a rezar “tres días seguidos” para “superar” la crisis ) Con las formas literarias que tenían.

Con el paso del tiempo, la profecía de Miqueas se volvió famosa, y en la época de Jesús un gran sector del judaísmo esperaba literalmente que el futuro Mesías naciera en el pueblo de Belén. Por eso, durante los primeros años del cristianismo, cuando los apóstoles salieron a proclamar el Evangelio después de la resurrección de Jesús, tuvieron dificultades en ciertos ambientes judíos, porque Jesús era de Nazaret.

Frente a este problema, algunas comunidades cristianas, que gustaban de preparar sus predicaciones en formas de relato, decidieron presentar el nacimiento de Jesús como sucedido en Belén. Por supuesto que no pretendían falsear la realidad.

A los primeros cristianos no les preocupaba el hecho puramente histórico de que Jesús hubiera nacido en Nazaret. La certeza de que Él era el Mesías esperado constituía lo único importante. Por lo tanto, cuando Mateo y Lucas afirman que Jesús nació en Belén, lo que dicen es que Jesús resulta ser realmente el Mesías que todos esperaban; el que cumplió las expectativas que ningún otro rey de Israel había cumplido.

El acento de los evangelistas se pone en esta idea. Y así lo entendieron y lo tomaron también los lectores de los primeros siglos. (Leer también:  Fuerte gesto de Larreta a la Iglesia: “Consagro mi gestión al Sagrado Corazón de Jesús” ) Dos maneras De nacer.

Cuando Marcos —el primer evangelista que escribió— compuso su relato, no incluyó el dato del nacimiento de Jesús en Belén. Como la mayoría de sus lectores eran de origen pagano, no tuvo problemas en conservar el recuerdo de que había nacido en Nazaret. En cambio, cuando escribieron Mateo y Lucas, muchos de sus lectores eran cristianos procedentes de los judíos, a quienes sí les preocupaba que Jesús fuera el verdadero Mesías esperado por Israel, el descendiente de David.

Por eso ambos evangelistas recurrieron a la narración teológica de su nacimiento en Belén, cada uno de manera diferente, según lo que ellos conocían. Mateo presentó a Jesús naciendo en Belén porque su familia era de allí; y Lucas presentó a Jesús naciendo en Belén por un accidente histórico.

Por último, Juan, que en el momento de componer su Evangelio había llegado a la convicción de que Jesús era Dios y existía desde siempre, tampoco tuvo interés de incluir el nacimiento de Jesús en Belén. Para él, su origen terreno no tenía ninguna importancia porque su verdadero origen era el cielo; Él procedía de Dios y eso bastaba para declararlo Mesías.

  • Por eso, Juan, al igual que Marcos, conservó el dato histórico del origen nazareno de Jesús;
  • Recordarlo en Navidad;
  • ¿ Dónde nació pues Jesús? Probablemente, en Nazaret;
  • Su origen nazareno aparece afirmado en veinte lugares del Nuevo Testamento;

Aunque las dos únicas veces que aparece Belén como su patria son Mateo 2 y Lucas 2. Su nacimiento en Belén es una afirmación teológica; no expresa una evidencia histórica, sino una idea religiosa. Entonces, ¿d ebemos abandonar las tradiciones de Belén o dejar a un lado los villancicos, renunciar a los pesebres y excluir las peregrinaciones a la ciudad de Belén, donde actualmente se venera la gruta de su nacimiento? Por supuesto que no, así como no desechamos la celebración de la Navidad el 25 de diciembre, aun cuando sabemos que ese día no nació Jesús.

Decir que Jesús nació en Belén continúa siendo, para los creyentes, una afirmación fundamental. Equivale a afirmar que Dios, a pesar de ser omnipotente y poderoso, optó por una ciudad minúscula. Prefirió apostar por la debilidad, por la humildad, por los oprimidos, por la mansedumbre.

Significa que un Mesías frágil y endeble basta para quebrar el poder de los poderosos de este mundo. Y que quienes afirman seguir a este Mesías deben emplear sus mismas armas. por Ariel Álvarez Valdés*.

¿Dónde queda Belén en qué país?

En Qué País Nació Jesús Calles de Belén | Belén se encuentra a 9 km de Jerusalén pero está en Cisjordania y por tanto pertenece a Palestina. Está separada del territorio israelí por un un muro, célebre además por ser el lugar donde Bansky dejó uno de sus grafittis más célebres, el de un hombre lanzando un ramo de flores en vez de una bomba. La Basílica de la Navidad es el lugar más importante de la ciudad y está cargado de significado y de simbología.

El templo  fue construido sobre la gruta o cueva en donde se supone que nació Jesús y fue construido en el siglo IV por la Emperatriz Helena, empeñada en preservar todos los lugares y símbolos del cristianismo.

Dos siglos más tarde fue destruido por un incendio y el Emperador Justiniano lo restauró dándole la forma que ahora tiene. La entrada es minúscula pese a la grandiosidad e importancia del templo. La razón es para impedir que los hombres entrasen a caballo.

A ambos lados del altar se baja a la Cueva de la Natividad , el lugar exacto donde se supone que nació Jesús, El portal de Belén , cuya máxima atracción es una estrella de catorce puntas que muestra el lugar exacto donde nació Jesús y que los más fervorosos no se cansan de besar.

A la derecha de la estrella se encuentra La Capilla del Pesebre, donde se supone que estaban San José,  La Virgen María y los animales. En Qué País Nació Jesús Wildnerdpix En Qué País Nació Jesús El Portal de Belén, y lugar exacto donde la Biblia dice que nació Jesús | Joel Carillet En Qué País Nació Jesús La estrella de catorce puntas que es besada por los fieles y muestra el lugar exacto donde nació Jesús | mtcurado En Qué País Nació Jesús Interior de la basílica de la Natividad | klug-photo La Gruta de la leche o iglesia de la Gota de Leche. Está muy cerca de la Basílica de la Navidad y es otro de los templos fundamentales de Belén y lugar de peregrinación. Se supone que la Sagrada Familia encontró allí refugio durante la matanza de inocentes en la Huida a Egipto. A la virgen se le cayó allí una gota de leche que hizo que el suelo de la cueva se pusiese blanco. En Qué País Nació Jesús Basílica de la Gota de Leche | jagi11 La iglesia de los Pastores : siguiendo la calle de la iglesia de la Gota de Leche y subiendo la colina entre cipreses, a unos 3 km, se llega a a la preciosa iglesia de los Pastores, también rodeada de numerosas grutas. La tradición cristiana sitúa aquí el pasaje de la Biblia donde tuvo lugar  la aparición del Ángel del Señor  que al principio atemorizó a los pastores y dijo: “No temáis, pues os anuncio una gran alegría, que lo será para todo el pueblo: os ha nacido hoy en la ciudad de David, un salvador que es el Cristo Señor; y esto os servirá de señal: encontrareis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre”…Por tanto este lugar es también de gran importancia en la ruta por Belén. En Qué País Nació Jesús La iglesia del Campo de los Pastores, a 3 km de Belén, el lugar donde, según la Biblia, el ángel se le apareció a los pastores para anunciarles el nacimiento de Jesús. | efesenko La tumba de Raquel La tumba de Raquel es el lugar más venerado por los musulmanes. Se encuentra en Belén, cerca ya de Jersusalén y es un lugar de veneración puesto que, según la tradición, allí se encuentra enterrada la matriarca Raquel. La tumba ha sido sagrada para cristianos, musulmanes y judíos desde hace 2000 años. En Qué País Nació Jesús Foto antigua de la Tumba de Raquel, lugar sagrado para los católicos, judíos y sobre todo, para los musulmanes | bauhaus1000 Graffitis del muro de separación. También son dignos de ver. Sobre todo la famosísima obra de Bansky a la que nos hemos referido más arriba En Qué País Nació Jesús Grafitti de Banksy en el muro que separa Israel de Palestina. | VanderWolf-Images En Qué País Nació Jesús Joel Carillet Cómo llegar a Belén Lo más fácil es hacerlo desde Jerusalén. Hay quien incluso lo hace andando pero es más recomendable ir en taxi, que se puede coger en la Puerta de Damasco, en la vieja Jerusalén. también hay un autobús que va desde este punto a la zona fronteriza de Gilo. , Hay que llevar pasaporte ya que vas a salir de Israel para pasar a Palestina con lo cual deberás pasar por un control de Pasaportes..

¿Cuál es el país de Jesús?

Jesús de Nazaret nació y vivió en Palestina, país de Oriente Medio. Desde el año 64aC. Formaba parte del imperio romano. Históricamente ha recibido diferentes nombres: Judea, Canaán, Israel, Tierra Santa, etc.

¿Dónde nació y murió Jesús?

​​ Según la opinión mayoritariamente aceptada en medios académicos, basada en una lectura crítica de los textos sobre su persona, Jesús de Nazaret fue un predicador judío​ que vivió a comienzos del siglo I en las regiones de Galilea y Judea, y fue crucificado en Jerusalén en torno al año 30, bajo el gobierno de Poncio.

¿Cuándo fue el verdadero nacimiento de Jesús?

La historia de la cruz de jesús – Leer artículo El 25 de diciembre ya era la fecha convencional cuando Dionisio el Exiguo elaboró su datación. La elección de este día se debía a que era la fiesta del Sol Invicto, un dios oriental que había sido elevado a culto oficial del Imperio por parte del emperador Aureliano a finales del siglo III.

A partir del reinado de Constantino y especialmente de Teodosio -quien hizo del cristianismo la religión oficial- los esfuerzos de evangelización implicaron la superposición de las celebraciones cristianas a las paganas para facilitar la conversión.

También con este fin se identificaron muchos aspectos del cristianismo y del propio Jesús con los dioses antiguos : la elección del Sol Invicto servía como metáfora de que Jesús era el nuevo “sol” que había venido a iluminar el mundo..

¿Por qué Jesús nació en Belén y no en Nazaret?

Mateo y Lucas nos dicen que Jesús nació en Belén, mientras que los otros dos evangelistas, Marcos y Juan, presuponen que su venida al mundo ocurrió en Nazaret. 08/04/2020 La figura de Jesucristo sigue presentando misterios sin respuesta. La vida del personaje histórico y la del mesías cristiano se entremezclan en una especie de torbellino que dificulta enormemente saber qué detalles ocurrieron y cuáles fueron creados como parábola o para construir la figura religiosa que ha llegado a nuestros días.

La Navidad , por ejemplo, gira en torno a la idea de celebrar el nacimiento de Jesús como símbolo de esperanza y alegría para la humanidad, pero ni siquiera en ese detalle logramos ponernos de acuerdo.

¿Cuándo y dónde nació el que se convertiría en salvador de la religión cristiana? Mientras que la primera pregunta no tiene una respuesta clara y la creencia convencional (25 de diciembre) se sabe errónea, la segunda cuestión parece indicar que el nacimiento ocurrió en Nazaret.

  • Para el cuándo no existe una respuesta clara o correcta;
  • La creencia general es que el nacimiento de Jesús tuvo lugar en algún momento de otoño pero no se conoce con certeza una fecha aproximada;
  • El día 25 de diciembre fue establecido por la Iglesia como fecha convencional en el siglo IV;

Esta decisión no se debía a una creencia, sino a que era por esas fechas cuando los romanos celebraban la fiesta del Sol Invicto en honor al dios Mitra. Además, se cree que Jesús nació 6 años antes del comienzo de la era cristiana , previa a la muerte del rey Herodes el Grande.

Si ahora nos centramos en el ‘dónde’, la duda sigue existiendo pero parece que hay pruebas que apuntan en un camino concreto. En la Biblia , Mateo y Lucas nos dicen que Jesús nació en Belén , mientras que Marcos y Juan (los otros dos evangelistas) presuponen que su venida al mundo ocurrió en Nazaret.

Resulta más verosímil que la verdad histórica se encuentre en la segunda tradición: Jesús habría nacido en Nazaret , una pequeñísima aldea de Galilea que ni siquiera aparecía en los mapas de la época. Solo después, cuando se creyó firmemente en su condición de Mesías, se compuso la historia de su nacimiento en Belén para que cuadrara con la profecía de Miqueas.

  • Según esta profecía proveniente de la tradición judía, el Mesías debía llegar desde esta ciudad;
  • La versión que defiende que el nacimiento se produjo en Nazaret se ve de nuevo reforzada por hasta otras 20 menciones en el Nuevo Testamento;

Además, en esa época era tradición que el hijo llevara el nombre de su padre o del lugar donde había nacido. En la Biblia, Jesús nunca es llamado “de José ” o “de Belén” , sino que siempre se hace referencia a él como “Jesús de Nazaret”. Todas las pruebas y documentos parecen indicar que el lugar real de nacimiento de Jesucristo fue Nazaret, donde vivieron sus padres y pasó su infancia y gran parte de su vida.

  • El traslado de este momento a Belén parece ser un añadido posterior que, al igual que la fecha del 25 de diciembre, buscaba acoplar la historia a un contexto más amplio con el fin de que su difusión fuera más sencilla;
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Tampoco se tienen constancia de que el lugar donde nació fuera un pesebre ni de que fuera protegido por el calor corporal de animales de establo. En los textos que sitúan el nacimiento de Jesús en Belén, este ocurre allí debido a que José y María viajaron hasta la ciudad natal del carpintero para que se inscribiera en el censo de Quirinio ordenado por César Augusto. Imagen: iStock Photo Recibe la efeméride del día en tu mail ¡No te pierdas ninguna gran historia! Recibe la efeméride del día en tu email.

¿Cómo se llama la ciudad donde murio Jesús?

Iglesia del Santo Sepulcro Se trata de uno de los lugares más sagrados para los cristianos. Según los Evangelios, es el punto exacto donde se produjo la crucifixión de Cristo, su enterramiento y la resurrección. Está dentro de la Ciudad Vieja de Jerusalén y se encuentra justo al final de Vía Dolorosa.

¿Por qué se llama Jesús de Nazaret?

Ante la pregunta: ¿dónde nació Jesús?, la respuesta parece sencilla: en Belén. Lo aprendemos desde niños al celebrar la Navidad y lo cantamos todos los años en los villancicos alrededor del pesebre. Sin embargo, al analizar con detenimiento el Nuevo Testamento descubrimos que no es tan fácil fijar el lugar del nacimiento de Jesús.

Es cierto que dos evangelistas, Mateo y Lucas, afirman expresamente que Jesús nació en Belén. Mateo dice: “Cuando nació Jesús en Belén de Judea, en tiempos del rey Herodes. Y Lucas: “Cuando ellos (José y María) estaban allí (en Belén), ella dio a luz a su hijo primogénito”.

Pero los otros dos evangelistas, Marcos y Juan, presentan a Jesús como si hubiera nacido en Nazaret. En efecto, siempre lo llaman “Jesús de Nazaret”; y sabemos que en la Biblia, cuando después del nombre de una persona se menciona una ciudad, es porque se trata de su lugar de nacimiento.

¿Cuál sería, entonces, la cuna de Jesús: Belén o Nazaret? Marcos. El primer Evangelio que se escribió, el de Marcos, da a entender que Jesús nació en Nazaret. Ya al principio, cuando relata su bautismo, dice que Jesús “vino de Nazaret de Galilea”.

Es decir, no menciona ninguna otra ciudad de origen fuera de esta. Después, cuando Jesús se va a Nazaret, dice que “se fue a su patria”, y patria (en griego: “patris”) significa literalmente “la tierra natal”, “el lugar de nacimiento”. Esto lo confirma el mismo Jesús cuando, ante el escándalo que producen sus enseñanzas en Nazaret, él exclama: “Un profeta sólo en su patria, entre sus parientes y en su casa, es despreciado”.

Además, todo el mundo lo conoce como Jesús de Nazaret: el endemoniado de Cafarnaúm, la criada del Sumo Sacerdote, el ángel del sepulcro y hasta el mismo evangelista Marcos. Por lo tanto, cuando Marcos escribió su Evangelio, dio a entender a sus lectores que Jesús había nacido en Nazaret.

Un pueblo de mala muerte. El cuarto evangelista, San Juan, también afirma que Jesús nació en Nazaret. Comienza presentándolo como “un profeta de Nazaret” y dice que todos saben que era de Nazaret. Por ejemplo, Natanael, no quiere creer en él porque dice: “¿Acaso de Nazaret puede salir algo bueno?”.

En efecto, Nazaret era una ciudad ignota, minúscula y de mala fama. Tan insignificante, que en el Antiguo Testamento no se la menciona nunca. Incluso cuando el libro de Josué describe la región de Galilea, saltea a Nazaret.

Tampoco la nombra Flavio Josefo, el gran historiador judío del siglo I; al describir las guerras judías contra los romanos, menciona 54 ciudades galileas, pero ignora a Nazaret. Y el “Talmud”, una antiquísima colección de escritos judíos, enumera una lista de 63 ciudades galileas entre las que está ausente Nazaret.

  1. Debió de haber sido, pues, una pequeña aldea sin ninguna importancia;
  2. Por eso, que alguien tan importante como Jesús hubiera nacido allí, producía escándalo entre la gente;
  3. A pesar de eso, el “Evangelio de Juan” en ningún momento aclara que Jesús no era de Nazaret;

Al contrario, lo afirma varias veces. Por ejemplo, al contar una discusión entre los judíos sobre el origen de Jesús, dice que algunos lo rechazan como Mesías porque sabían que había nacido en Nazaret y comentaban: “¿Acaso el Mesías va a venir de Galilea? ¿No dice la Escritura que vendrá.

  1. de Belén?”;
  2. Y nadie se encarga de explicar que Jesús había nacido en Belén;
  3. Más adelante, San Juan afirma que los judíos no querían creer en Jesús porque era de Galilea, y “de Galilea no sale ningún profeta”;

En el “Cuarto Evangelio” tampoco se afirma que Jesús haya nacido en Belén. Al contrario, siempre está presente la idea de que había nacido en Nazaret. Sólo para la infancia. Vemos, pues, que las dos únicas veces en todo el Nuevo Testamento que se dice que Jesús nació en Belén son en los relatos de la infancia de Mateo y Lucas.

  1. En ninguna otra parte se menciona ni una sola palabra sobre el origen belenita de Jesús;
  2. Ni siquiera San Pablo, que tuvo que discutir acaloradamente varias veces con los lectores de sus cartas para tratar de convencerlos de que Jesús era el Mesías, y a quien le hubiera venido muy bien el argumento de que Jesús había nacido en Belén, parece conocer tal información;

Entonces, ¿son o no históricas las afirmaciones de Mateo y de Lucas sobre el nacimiento de Jesús en Belén? Posiblemente, no. En primer lugar, porque incluso estos dos evangelistas, a pesar de decir que Jesús nació en Belén, cuando lo presentan en su vida adulta cambian su discurso y lo llaman “Jesús de Nazaret”.

En segundo lugar, porque los relatos de Mateo y de Lucas se contradicen. Según San Mateo, Jesús habría nacido en Belén porque sus padres vivían en Belén. En cambio, según Lucas, Jesús habría nacido en Belén porque su familia estaba de paso en dicha ciudad con motivo de un censo.

También se contradicen en cuanto al tiempo que Jesús vivió en Belén. Según Mateo, estuvo allí casi dos años (Mateo 2,16), hasta que su familia huyó a Egipto. En cambio, según Lucas, Jesús se fue a vivir a Nazaret cuando tenía un mes y medio de vida (Lucas 2,39).

Las pruebas evangélicas sobre el nacimiento de Jesús en Belén son más bien débiles. Pero resultan ser abrumadores los datos en contra. Por eso, la mayoría de los biblistas hoy sostiene que la ciudad natal de Jesús no habría sido Belén, sino Nazaret.

Entonces, ¿por qué Mateo y Lucas colocan su nacimiento en Belén? Cada sucesor, una desilusión. En la actualidad, los estudiosos sostienen que el nacimiento de Jesús en Belén, más que una indicación histórica, resulta una indicación teológica. Es decir, los evangelistas Mateo y Lucas pretendieron transmitir una idea religiosa —enunciada en forma de relato histórico— con el fin de dejar una enseñanza.

  1. Se trata de una manera de expresarse muy propia de los pueblos semitas;
  2. ¿Y cuál es la enseñanza del nacimiento de Jesús en Belén? Quisieron decir que Jesús era el Mesías esperado por el pueblo de Israel;

Con objeto de entender esto, tengamos en cuenta que para la mentalidad judía el futuro Mesías debía ser un descendiente de la familia del rey David, porque según una antigua promesa que el profeta Natán había hecho al rey David cuando este vivía, Dios había asegurado que nunca iba a faltar un descendiente suyo en el trono de Jerusalén.

Frente a la inseguridad en la que vivían los monarcas antiguos —de la falta de un hijo varón para que les sucediera y de que otra familia reinara en su lugar—, Dios le garantizó a David un descendiente suyo (un mesías, es decir, un ungido) en Jerusalén, y que lo haría con sabiduría y con justicia.

Pero cada nuevo rey que subía al trono de Jerusalén era una nueva desilusión para la gente, que veía cómo se sucedían gobernantes corruptos y malvados, desentendidos del pueblo y preocupados sólo por sus intereses personales. Por eso, cada vez que moría un rey y subía su hijo, el pueblo se preguntaba si este sería el Mesías que estaban esperando, que traería la prosperidad y la paz al pueblo.

Abandonar el ambiente de la Capital. Hacia el año 500 a. , un profeta anónimo anunció que iba a modificar estas expectativas. Esa profecía hoy se encuentra en el libro de “Miqueas”, y dice así: “Pero tú, Belén de Efratá, aunque eres pequeña entre las aldeas de Judá, de ti saldrá el que ha de dominar Israel.

Él gobernará con el poder y la majestad de Yahvé, su Dios”. El profeta anunciaba que sí iba a llegar el tan ansiado Mesías, pero vendría de Belén, de donde procedía el rey David. El profeta no se refería directamente al nacimiento de Jesús. Los profetas no adivinaban el futuro ni buscaban predecir hechos desvinculados de la realidad en la que vivían.

Su misión era anunciar una palabra de Dios que tuviera que ver con el presente de sus oyentes. Lo que el profeta quiso decir era que Dios no miraba con buenos ojos a la corte de Jerusalén. Esta ciudad, en la que se habían prostituido tantos reyes con el lujo y el poder, no resultaba ser el mejor ambiente para que surgiera el Mesías.

David, el rey más grande que tuvo Israel, había nacido en la humilde Belén. Si ahora ellos querían tener al nuevo Mesías, había que volver a preparar el mismo ambiente de Belén. La profecía no pretendía fijar un lugar geográfico para el nacimiento del sucesor del Rey.

  • Simplemente, proponía a los gobernantes de Jerusalén volver a la humildad y a la sencillez de sus orígenes;
  • Es decir, sugería cortar con el actual modo de hacer política;
  • Con las formas literarias que tenían;

Con el paso del tiempo, la profecía de Miqueas se volvió famosa, y en la época de Jesús un gran sector del judaísmo esperaba literalmente que el futuro Mesías naciera en el pueblo de Belén. Por eso, durante los primeros años del cristianismo, cuando los apóstoles salieron a proclamar el Evangelio después de la resurrección de Jesús, tuvieron dificultades en ciertos ambientes judíos, porque Jesús era de Nazaret.

Frente a este problema, algunas comunidades cristianas, que gustaban de preparar sus predicaciones en formas de relato, decidieron presentar el nacimiento de Jesús como sucedido en Belén. Por supuesto que no pretendían falsear la realidad.

A los primeros cristianos no les preocupaba el hecho puramente histórico de que Jesús hubiera nacido en Nazaret. La certeza de que Él era el Mesías esperado constituía lo único importante. Por lo tanto, cuando Mateo y Lucas afirman que Jesús nació en Belén, lo que dicen es que Jesús resulta ser realmente el Mesías que todos esperaban; el que cumplió las expectativas que ningún otro rey de Israel había cumplido.

El acento de los evangelistas se pone en esta idea. Y así lo entendieron y lo tomaron también los lectores de los primeros siglos. Dos maneras De naCer. Cuando Marcos —el primer evangelista que escribió— compuso su relato, no incluyó el dato del nacimiento de Jesús en Belén.

Como la mayoría de sus lectores eran de origen pagano, no tuvo problemas en conservar el recuerdo de que había nacido en Nazaret. En cambio, cuando escribieron Mateo y Lucas, muchos de sus lectores eran cristianos procedentes de los judíos, a quienes sí les preocupaba que Jesús fuera el verdadero Mesías esperado por Israel, el descendiente de David.

  • Por eso ambos evangelistas recurrieron a la narración teológica de su nacimiento en Belén, cada uno de manera diferente, según lo que ellos conocían;
  • Mateo presentó a Jesús naciendo en Belén porque su familia era de allí; y Lucas presentó a Jesús naciendo en Belén por un accidente histórico;

Por último, Juan, que en el momento de componer su Evangelio había llegado a la convicción de que Jesús era Dios y existía desde siempre, tampoco tuvo interés de incluir el nacimiento de Jesús en Belén. Para él, su origen terreno no tenía ninguna importancia porque su verdadero origen era el cielo; Él procedía de Dios y eso bastaba para declararlo Mesías.

Por eso, Juan, al igual que Marcos, conservó el dato histórico del origen nazareno de Jesús. Recordarlo en Navidad. ¿Dónde nació pues Jesús? Probablemente, en Nazaret. Su origen nazareno aparece afirmado en veinte lugares del Nuevo Testamento.

Aunque las dos únicas veces que aparece Belén como su patria son Mateo 2 y Lucas 2. Su nacimiento en Belén es una afirmación teológica; no expresa una evidencia histórica, sino una idea religiosa. Entonces, ¿debemos abandonar las tradiciones de Belén o dejar a un lado los villancicos, renunciar a los pesebres y excluir las peregrinaciones a la ciudad de Belén, donde actualmente se venera la gruta de su nacimiento? Por supuesto que no, así como no desechamos la celebración de la Navidad el 25 de diciembre, aun cuando sabemos que ese día no nació Jesús.

Decir que Jesús nació en Belén continúa siendo, para los creyentes, una afirmación fundamental. Equivale a afirmar que Dios, a pesar de ser omnipotente y poderoso, optó por una ciudad minúscula. Prefirió apostar por la debilidad, por la humildad, por los oprimidos, por la mansedumbre.

Significa que un Mesías frágil y endeble basta para quebrar el poder de los poderosos de este mundo. Y que quienes afirman seguir a este Mesías deben emplear sus mismas armas. por Ariel Álvarez Valdés*.

¿Qué ciudad es Belén hoy en día?

Beit laħem]) es una ciudad ubicada en el centro de Cisjordania (Palestina), situada a unos 9 km al sur de Jerusalén y enclavada en los montes de Judea. Desde diciembre de 1995, se encuentra administrada por la Autoridad Palestina, que adoptó el nombre de Estado de Palestina en 2013.

¿Cuál era la lengua de Cristo?

Bilingüe o políglota – La existencia de Jesús está ampliamente aceptada, aunque la veracidad histórica de los eventos de su vida todavía es tema de calurosos debates. No obstante, los historiadores pueden iluminarnos un poco sobre qué idioma hablaría el hijo de un carpintero de Galilea que se convirtió en un líder espiritual.

  1. Fuente de la imagen, AFP Pie de foto, Netanyahu insistió en que, además de arameo, Cristo hablaba hebreo;
  2. Tanto el Papa como el primer ministro israelí están en lo correcto, dice el doctor Sebastian Brock, profesor emérito en arameo de la Universidad de Oxford, aunque era importante para Netanyahu clarificar su declaración;

El hebreo era la lengua de los eruditos y de las escrituras. Pero el idioma “cotidiano” de Jesús hubiera sido el arameo y es este último el que la mayoría de los estudiosos de la Biblia dicen que habló. El arameo es el idioma que Mel Gibson utilizó para su película “La Pasión de Cristo”, aunque no pudo sacar todas las palabras del guion del arameo del Siglo I.

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Algunas provienen de siglos más recientes. El árabe no se introdujo en Palestina sino hasta mucho después. Sin embargo, el latín y el griego eran de uso común en la época de Cristo. Es poco probable que Jesús supiera latín más allá de unas pocas palabras, explica Jonathan Katz, académico de Lenguas Clásicas de la Universidad de Oxford.

El latín era el idioma de las leyes y del ejército romano y sería improbable que Jesús estuviera familiarizado con el vocabulario de ese mundo.

¿Cuántos habitantes tenía Belén Cuándo nació Jesús?

Re:Documentación para el Belén. Nazaret era un pueblo enclavado en una escarpada montaña; caracterizado por sus casas blancas, cuadradas, adornadas con celosías y construidas con piedra y revoque. En aquella época tenía unos 120 habitantes, y aproximadamente 30 casas.

¿Dónde vivió Jesús de niño?

Descubierta y olvidada – Esta construcción de piedra y mortero ya había sido estudiada anteriormente. En 1888 el erudito bíblico Víctor Eguin aseguraba que allí se encontraba la casa natal de Jesús. En el siglo IV se construyó una especie de Iglesia en una cripta cercana para rememorar el sitio.

Después, encima de esta construcción, se edificó un templo de estilo Bizantino. Ahora es el Convento de las Hermanas de Nazaret. Si varias Iglesias se construyeron sobre una simple casa, es que se trata de un lugar muy especial, asegura Dark Muy cerca de la zona se encuentra la famosa Iglesia de la Anunciación , reconstruida tantas veces.

Según las escrituras bíblicas, fue alzada en el lugar donde el ángel Gabriel anunció a la Virgen María que sería Madre de Dios. Quizá la presencia de este gran templo, hizo que se olvidaran de la casa natal de Jesús, según ha explicado Dark. Las Hermanas de Nazaret conocían la tradición oral que situaba bajo sus cimentos la antigua casa donde San José y la Virgen María criaron a Jesús.

  1. Por eso, mandaron realizar excavaciones;
  2. El investigador Henri Senés estuvo trabajando en el proyecto entre 1934 a 1964, pero no publicó ningún estudio;
  3. El Nazaret donde Jesús pasó gran parte de su infancia es curiosamente una de las ciudades con mayor población musulmana de Israel;

Ha sido terreno de guerras y, durante cientos de años, se han construido diversos asentamientos. Los arqueólogos no lo han tenido nada fácil para encontrar restos en la zona..

¿Qué países existían en la época de Jesús?

Jesús de Nazaret nació y vivió en el espacio del Oriente Medio llamado aún hoy Palestina. Desde el año 64 a. , esta región formaba parte del imperio romano. Históricamente ha recibido diferentes nombres: Judea, Canaán, Israel o Tierra Santa, si bien cada uno de ellos alude a realidades geográficas difusas y no estrictamente coincidentes. Vista de Jerusalén.

¿Qué fue lo que hizo Jesús en Palestina?

Marcos 2:1–12 ; 5:22–43 – La fe en Jesucristo produce milagros en nuestra vida Diga a los alumnos que aunque es importante saber que Jesús hizo milagros al “[recorrer] los caminos de Palestina” ( “El Cristo Viviente: El Testimonio de los Apóstoles” , pág.

  • 2), es tal vez más importante saber que Él continúa efectuando milagros hoy en día;
  • Pida a los alumnos que lean Éter 12:12, 18 en silencio y que escriban un principio del Evangelio que aprendan en esos versículos;

Invite a algunos alumnos a compartir con la clase lo que hayan escrito. (Entre las respuestas se debe mencionar la siguiente verdad: Al ejercer fe en Jesucristo, podemos ver Su milagroso poder en nuestra vida ). A fin de ayudar a los alumnos a analizar esa verdad, escriba las siguientes referencias de las Escrituras en la pizarra: Marcos 2:1–12 ; Marcos 5:22–24, 35–43 y Marcos 5:25–34. Luego de concederles tiempo suficiente, pregunte:

  • ¿Qué evidencia de fe en Jesucristo han encontrado?

Entregue a cada alumno una copia del volante “Sanar a los enfermos”. Imagen Sanar a los enfermos El élder Dallin H. Oaks, del Quórum de los Doce Apóstoles, enseñó que la fe es esencial para que ocurran milagros: Imagen “La fe es esencial para sanar mediante los poderes del cielo. En el Libro de Mormón incluso se enseña que ‘si no hay fe entre los hijos de los hombres, Dios no puede hacer ningún milagro entre ellos’ ( Éter 12:12 ) [véase también 1 Nefi 7:12 ; D. y C. 35:9 ]. En un memorable discurso sobre la bendición a los enfermos, el presidente Spencer W.

( Nota: Tal vez desee señalar que esos pasajes contienen otro ejemplo de un modelo o tema en las Escrituras). Divida la clase en tres grupos. Asigne a cada grupo la lectura de uno de esos pasajes y pídales que determinen la forma en que se demostró la fe en Jesucristo.

Kimball dijo: ‘A menudo se le resta importancia a la necesidad de la fe. Parecería que con frecuencia el afligido y la familia dependen enteramente del poder del sacerdocio y del don de sanidad que esperan que tengan los hermanos que lo bendicen, mientras que la responsabilidad mayor la tiene el que recibe la bendición… El elemento más importante es la fe de la persona cuando ésta es consciente y responsable.

  1. “Tu fe te ha sanado” [ Mateo 9:22 ] lo dijo el Maestro con tanta frecuencia que casi se convierte en un refrán’ [véase “El don de sanidades” , Liahona , septiembre de 1982, pág;
  2. 43]” ( “Sanar a los enfermos” , Liahona , mayo de 2010, págs;

48–49). El élder Dallin H. Oaks también nos recordó que parte importante de tener fe es estar dispuestos a aceptar la voluntad de Dios: Imagen “Al ejercer el poder indudable del sacerdocio de Dios y conforme atesoremos Su promesa de que Él escuchará y contestará la oración de fe, siempre debemos recordar que la fe y el poder sanador del sacerdocio no pueden producir un resultado contrario a la voluntad de Aquel de quien es este sacerdocio. Este principio se enseña en la revelación que ordena que los élderes de la Iglesia pongan las manos sobre los enfermos. La promesa del Señor es que ‘el que tuviere fe en mí para ser sanado, y no estuviere señalado para morir , sanará’ ( D. y C. 42:48 ; cursiva agregada).

  • Del mismo modo, en otra revelación moderna el Señor declara que cuando uno ‘pide en el Espíritu… es hecho conforme a lo que pide’ ( D;
  • y C;
  • 46:30 ) [véase también 1 Juan 5:14 ; Helamán 10:5 ];
  • “De todo esto aprendemos que incluso los siervos del Señor, al ejercer Su divino poder en una situación en la que haya suficiente fe para ser sanado, no pueden dar una bendición del sacerdocio que cause que una persona sea sanada si esa sanidad no es la voluntad del Señor;

“Como hijos de Dios, al saber de Su gran amor y Su conocimiento supremo de lo que es mejor para nuestro bienestar eterno, confiamos en Él. El primer principio del Evangelio es fe en el Señor Jesucristo, y la fe significa confianza. Sentí esa confianza en un discurso que dio mi primo en el funeral de una adolescente que había muerto a causa de una enfermedad grave.

  • Pronunció estas palabras, que primero me sorprendieron y que después me edificaron: ‘Sé que fue la voluntad del Señor que ella muriera; tuvo buena atención médica, recibió bendiciones del sacerdocio, su nombre estaba en la lista de oración del templo y fue objeto de cientos de oraciones para que se restableciera su salud;

Sé que hay suficiente fe en esa familia para que ella hubiera sido sanada a menos que fuera la voluntad del Señor llevársela a Su hogar en este momento’. Sentí esa misma confianza en las palabras del padre de otra joven excepcional cuya vida fue arrebatada por el cáncer en su adolescencia.

Él declaró: ‘La fe de nuestra familia radica en Jesucristo, y no depende de los resultados’. Esas enseñanzas me suenan verdaderas. Hacemos todo lo que podemos para que un ser querido sane, y después le confiamos al Señor el resultado” ( “Sanar a los enfermos” , Liahona , mayo de 2010, pág.

50). A fin de ayudar a los alumnos a comprender la necesidad de la fe para que se efectúen milagros, invite a un alumno a leer en voz alta la primera declaración del volante, del élder Dallin H. Oaks, del Quórum de los Doce Apóstoles: Después pregunte:

  • ¿Qué importantes verdades enseñó el élder Oaks acerca de la fe?

A fin de transmitir a los alumnos perspectivas adicionales del élder Oaks, considere leer o compartir en sus propias palabras la segunda declaración del volante. También puede mencionar que el élder Oaks dirigió estas palabras a los poseedores del sacerdocio. Analicen las siguientes preguntas:

  • ¿Qué dijo el élder Oaks que se requiere de nosotros cuando oramos con fe para que ocurra un milagro?
  • ¿Por qué es importante recordar que lo que pedimos debe estar de acuerdo con la voluntad del Padre Celestial?

Testifique que todavía ocurren milagros hoy en día. Comparta las siguientes palabras del élder Dallin H. Oaks, del Quórum de los Doce Apóstoles: Imagen “Todos los días ocurren milagros en la obra de nuestra Iglesia y en la vida de los miembros. Muchos de ustedes han presenciado milagros, tal vez más de los que piensan” ( “Miracles” , Ensign , junio de 2001, pág. 6).

  • ¿Por qué creen que no siempre reconocemos los milagros que ocurren en nuestra vida? (A medida que los alumnos respondan, tal vez desee señalar que son pocos los milagros que ocurren como manifestaciones espectaculares del poder del Señor. Muchos milagros son relativamente pequeños y ocurren en privado. [Véase Sydney S. Reynolds, “Un Dios de milagros” , Liahona , julio de 2001, págs. 12–14]).
  • ¿Qué revelan esos milagros pequeños y privados acerca del interés que el Padre Celestial y Jesucristo tienen en nosotros?
  • ¿Qué ejemplos de milagros “pequeños” y “cotidianos” les vienen a la mente? (Si nadie responde, considere compartir algunos de los ejemplos que menciona la hermana Sydney S. Reynolds, de la Presidencia General de la Primaria, en “Un Dios de milagros” [ Liahona , julio de 2001, págs. 12–14]).

Invite a los alumnos a responder por escrito las siguientes preguntas:

  • ¿Qué pueden hacer para reconocer mejor los milagros del Señor, tanto pequeños como grandes, que ocurren en su vida, y para tener más gratitud por ellos?

(Anime a los alumnos a considerar con espíritu de oración cómo pueden poner en práctica lo que hayan escrito. Para concluir la lección, pregunte si hay alguien que quisiera compartir su testimonio del Salvador y del amor que han sentido de Él y por Él.

¿Por qué Jesús de Nazaret si nació en Belén?

Mateo y Lucas nos dicen que Jesús nació en Belén, mientras que los otros dos evangelistas, Marcos y Juan, presuponen que su venida al mundo ocurrió en Nazaret. 08/04/2020 La figura de Jesucristo sigue presentando misterios sin respuesta. La vida del personaje histórico y la del mesías cristiano se entremezclan en una especie de torbellino que dificulta enormemente saber qué detalles ocurrieron y cuáles fueron creados como parábola o para construir la figura religiosa que ha llegado a nuestros días.

La Navidad , por ejemplo, gira en torno a la idea de celebrar el nacimiento de Jesús como símbolo de esperanza y alegría para la humanidad, pero ni siquiera en ese detalle logramos ponernos de acuerdo.

¿Cuándo y dónde nació el que se convertiría en salvador de la religión cristiana? Mientras que la primera pregunta no tiene una respuesta clara y la creencia convencional (25 de diciembre) se sabe errónea, la segunda cuestión parece indicar que el nacimiento ocurrió en Nazaret.

Para el cuándo no existe una respuesta clara o correcta. La creencia general es que el nacimiento de Jesús tuvo lugar en algún momento de otoño pero no se conoce con certeza una fecha aproximada. El día 25 de diciembre fue establecido por la Iglesia como fecha convencional en el siglo IV.

Esta decisión no se debía a una creencia, sino a que era por esas fechas cuando los romanos celebraban la fiesta del Sol Invicto en honor al dios Mitra. Además, se cree que Jesús nació 6 años antes del comienzo de la era cristiana , previa a la muerte del rey Herodes el Grande.

Si ahora nos centramos en el ‘dónde’, la duda sigue existiendo pero parece que hay pruebas que apuntan en un camino concreto. En la Biblia , Mateo y Lucas nos dicen que Jesús nació en Belén , mientras que Marcos y Juan (los otros dos evangelistas) presuponen que su venida al mundo ocurrió en Nazaret.

Resulta más verosímil que la verdad histórica se encuentre en la segunda tradición: Jesús habría nacido en Nazaret , una pequeñísima aldea de Galilea que ni siquiera aparecía en los mapas de la época. Solo después, cuando se creyó firmemente en su condición de Mesías, se compuso la historia de su nacimiento en Belén para que cuadrara con la profecía de Miqueas.

Según esta profecía proveniente de la tradición judía, el Mesías debía llegar desde esta ciudad. La versión que defiende que el nacimiento se produjo en Nazaret se ve de nuevo reforzada por hasta otras 20 menciones en el Nuevo Testamento.

Además, en esa época era tradición que el hijo llevara el nombre de su padre o del lugar donde había nacido. En la Biblia, Jesús nunca es llamado “de José ” o “de Belén” , sino que siempre se hace referencia a él como “Jesús de Nazaret”. Todas las pruebas y documentos parecen indicar que el lugar real de nacimiento de Jesucristo fue Nazaret, donde vivieron sus padres y pasó su infancia y gran parte de su vida.

  • El traslado de este momento a Belén parece ser un añadido posterior que, al igual que la fecha del 25 de diciembre, buscaba acoplar la historia a un contexto más amplio con el fin de que su difusión fuera más sencilla;

Tampoco se tienen constancia de que el lugar donde nació fuera un pesebre ni de que fuera protegido por el calor corporal de animales de establo. En los textos que sitúan el nacimiento de Jesús en Belén, este ocurre allí debido a que José y María viajaron hasta la ciudad natal del carpintero para que se inscribiera en el censo de Quirinio ordenado por César Augusto. Imagen: iStock Photo Recibe la efeméride del día en tu mail ¡No te pierdas ninguna gran historia! Recibe la efeméride del día en tu email.

¿Cómo se llama la ciudad de Jesús?

Bibliografía [ editar ] –

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