M. y L. J. Flaherty
Trad. y Adap. David A. Mijares
RE LA SOL LA
RE LA SOL
Nadie vive ya para sí,
LA RE LA SOL
y nadie muere ya para sí;
LA RE LA SOL RE
porque el vivir es vivir para el Señor,
MIm SOL LAsus LA
y el morir, morir para el Señor.
RE LA SOL LA RE
En vida o muerte somos del Señor,
SIm SOL RE LA
por lo cual Cristo murió y resucitó.
SIm LA SOL RE
Todos estaremos en el juicio ante el Señor
SIm SOL RE
y ante él toda rodilla ha de doblarse
SIm LA RE SOL RE LA
y toda lengua ha de alabar a Dios.
Ni la vida ni la muerte lograrán
apartarnos del amor del Señor.
No hay nada ni nadie en el cielo o en la tierra
que pueda separarnos de su amor.
Ofrézcanse en sacrificio vivo,
santo y agradable ante el Señor;
no vivan más según la mente de este mundo,
y déjense formar por su Espíritu.
No, todos no hemos de morir,
Jesucristo nos transformará;
y cuando suene la trompeta final
resucitaremos victoriosos.